La educación en Canadá es ampliamente reconocida como una de las mejores del mundo. Incluso, supera la media de los países desarrollados, tal y como lo detalla un informe hecho por Statiques Canadá en diciembre de 2016. En ese sentido, 09 de cada 10 canadienses (90 %) con edades comprendidas entre 25 y 64 años, han completado sus estudios secundarios. Este porcentaje es superior a la media (78%) de los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).De puertas para adentro no nos debería extrañar, ya que Canadá destina el 8% de su PIB en educación (vs 5,2% OCDE). Igualmente, según datos del Banco Mundial, existe una proporción de un (01) profesor por cada 17 estudiantes. Estos datos permiten concluir que el tema educativo es tomado bien en serio en el país.


¡Ya dieciocho (18) meses en Montreal! ¡Cómo pasa el tiempo volando! Ya llevamos año y medio
año de esta nueva aventura, que representa esperanza, fe y sobretodo,
¡paciencia!
Aunque pudiera sonar poco relevante, una de las mayores incomodidades que hemos encontrado aquí en Canadá, es el tratamiento de los olores producto de la cocción de alimentos.
Una de las mayores preocupaciones que teníamos cuando empezamos a estudiar, fue de cómo íbamos a hacer cuando nos tocara redactar informes y/o trabajos en francés. Si bien es cierto que se nos da bien la escritura, no es menos cierto que a nivel universitario, la dificultad en cuanto a redacción y exposición de ideas, aumenta.
Durante la estación más fría del año, es común el uso de la calefacción para calentar las casas en Canadá. En ese sentido, podemos encontrar apartamentos donde el chauffage (a gas) está incluido en el precio del alquiler, pero hay otros, donde la calefacción es eléctrica y cuyos gastos de operación corren por cuenta del arrendatario.