Perspectiva femenina de la inmigración

Hoy por primera vez escribo para los seguidores de este blog, que ha sido una excelente creación de mi querido esposo. Lo hago por petición de él, para que exponga mi punto de vista, como mujer, del proceso de inmigración.

Debo confesar que aunque fui yo quien propuso la idea de emigrar del país, ha sido mi esposo quien ha llevado la dirección del proceso y quien ha hecho grandes esfuerzos en preparación profesional e investigación de requisitos. Eso para mí ha servido de gran estímulo, me ha dado una fuerza enorme en los momentos de incertidumbre que implica este proceso. Meses y meses de espera sin saber nada del BIQ, por el que todos debemos pasar. Pero aunque el dirija él proceso, hemos trabajado en equipo, siempre los dos enfocados en el logro del objetivo final.

Desde mi punto de vista para involucrarse en un proceso así, en primer lugar hay que tener mucha paciencia (creo que ya los que estamos en esto la tenemos obligados jajaja), nada en la vida que valga la pena es fácil y todo lo que nos cuesta es sumamente valorado. Lo que pienso es que debemos seguir nuestra vida del día a día de manera normal, pero manteniendo siempre nuestra esperanza en que si hemos hecho todo bien en el proceso (planillas, estudio y exámenes de idiomas, estudios de postgrado, traducción de documentos, etc.), todo ese esfuerzo será recompensado al final. No debemos parar de vivir, porque la vida es ahora… Esto implica que debemos hacer ahora todo aquello que nos haga sentir bien y no esperar para cuando estemos en Canadá… Así la ansiedad baja, por lo menos así lo creo yo.

Para los que emigran en pareja les digo que el enfoque debe ser de ambos, si uno le da toda la responsabilidad del proceso al otro, además de causar frustración en el que lleve el peso, no avizora un buen futuro como inmigrantes, porque si aquí tenemos todo a la mano y lo conocemos, allá todo será nuevo y más difícil al principio. Lo digo con algo de conocimiento, porque viví fuera del país en dos oportunidades, una cuando niña y otra ya adulta cuando aún estaba soltera, y sé que el proceso al principio no es fácil, siempre añoramos nuestro país, esté como esté, pero luego recordamos nuestro objetivo y continuamos el camino en el país que nos acoge. Ahora que voy a emigrar en pareja, pienso que será un poco más sencillo porque tendré quien me apoye y me anime, lo que hará los primeros tiempos mucho más suaves de llevar. Pero no con esto quiero desanimar a los que emigran solos, lo hice una vez y ¡claro que se puede! Si se preguntan por qué me devolví, fue porque mi objetivo no era quedarme en ese momento…

Para mí este proceso ha sido una especie de autoexamen en muchos aspectos, tanto personal como profesional, lo que me ha servido para valorar mucho las cosas que tengo que quizá no apreciaba tanto y saber que poseo potencial para asumir nuevas formas de vivir, como se dice hoy en día, para reinventarme. Porque para mí este proceso es eso, una oportunidad de sacar lo mejor de cada uno para recorrer un camino lleno de esperanza y cosas nuevas.

¡Hasta pronto!

AUTOR:Aleymina - De Valencia a Montreal©

Somos una pareja venezolana en el proceso de inmigración a Montreal, Quebec. Canadá.
Este blog es una bitácora detallada de todo nuestro proyecto de migración.