Experiencia con nuestro primer invierno

La nieve se derrite, los pájaros llegan en bandadas y los árboles nuevamente retoñan. Pues sí, son símbolos inequívocos que la primavera ha llegado y ha dejado atrás el invierno, nuestro primer invierno.

Los canadienses acostumbran a decir que consideran que un inmigrante es residente pleno cuando pasa su primer invierno y quiere seguir en el país. Y a pesar de que las temperaturas no fueron tan fuertes como en otras épocas, podemos afirmar que pasamos esta prueba positivamente.

Déjennos contarles como fue nuestra experiencia, que nos gustó, que no tanto y que nos pareció curioso.

Cuando hicimos pública nuestra intención de residir en Canadá, fueron dos (02) las preguntas que nos repetían con insistencia: "¿Ya tienen trabajo?" y "¿Cómo van a hacer con el frío?". Ya con la experiencia encima, podemos afirmar que si te preparas bien, es toda una aventura.

Entre las conclusiones que nos deja el saliente invierno, están:

• Primero que nada, el invierno no significa que vas a pasar ocho (08) horas a la intemperie. En algunas oportunidades, ni siquiera sales al aire libre, ya que las estaciones de metro se conectan a través de la ciudad subterránea, que albergan decenas de kilómetros de tiendas, supermercados, restaurantes y conexiones a escuelas y universidades.
• Todo tiene calefacción: metro, autobuses, centros comerciales, escuelas.
• Nadie siente el frío igual. Por ejemplo, a mi esposa se le enfrían en demasía los pies y a mí, las manos. Es cuestión de identificar tu punto débil y protegerte como es debido.
• La ropa es importantísima. Es necesario adquirir productos de buena calidad que permitan pasar el invierno cómodamente. El uso de medias compuestas de lana y botas impermeables, es vital.
  
• Vimos en contadas ocasiones, las calles y aceras repletas de nieve. Esto se debe al sistema de limpieza de la ciudad, el cual despeja todo de nieve, permitiéndote caminar o manejar tu vehículo sin ningún problema.
• Una cosa es la temperatura calculada y otra la sensación térmica. Éste último es un indicador sumamente importante, ya que permite evaluar y determinar acertadamente el frío que se sentirá en la piel. La diferencia entre la temperatura calculada y la sensación térmica obedece a varios factores, como son el viento y la humedad.
• Aquí las construcciones están diseñadas para soportar las inclemencias del frío. Doble sistemas de ventanas, aislante en las paredes, calefacción en todas las áreas son algunas de las características de las casas por acá.
• Los dos (02) tipos de calefacciones más comunes por acá son la eléctrica (a través de una resistencia) y la de gas (con una caldera). La primera tiene como ventajas la capacidad de regulación de la temperatura mediante un termostato y el uso por separado en distintos ambientes. La de gas, por lo general, viene incluida para todo el edificio, por lo que no se contabiliza en la factura eléctrica.
• La calefacción eléctrica tiene muchas contras. Reseca el ambiente, bajando la humedad del lugar. Esto trae como consecuencia: resequedad en toda la piel, dificultad para respirar, irritación en la garganta, amén del alto costo que produce su uso.
• La calefacción de gas, por lo general, está incluida en el canon de arrendamiento del apartamento, ya que se tratan de unas calderas ubicadas en el sótano que calientan todo el edificio. La principal desventaja que tiene es la imposibilidad de regular la temperatura a voluntad. Conocemos ejemplos de personas que han pasado frío porque no la encienden a tiempo y de otras que han pasado calor, porque la ponen muy caliente.
• El uso y regulación de la calefacción depende de muchas condiciones. En nuestro caso, no tuvimos necesidad de usarla. Si, como leen. Nosotros no la encendimos jamás en invierno y nuestra cuenta de electricidad lo agradeció. Tenemos un termómetro digital que mide la temperatura interna del apartamento, y lo más frío que llegó a marcar fueron unos 15,5 °C (cuando afuera marcaba -27 °C con sensación térmica de -42 °C). En promedio, marcaba 18 °C, lo cual, con un sweater, es más que llevadero. Creo que esto se debe, más que nada, a la excelente aislante que tiene nuestro apartamento sumado a su posición en el edificio. Creemos que nuestro caso es excepcional, por lo que el criterio propio deberá prevalecer a la hora de escoger el uso de la calefacción, incluyendo la regulación de la temperatura ambiental.
• Existen productos para reducir el uso de la calefacción. Láminas protectoras en las ventanas, cinta adhesiva para las juntas de ventanas y puertas, etc. Incluso, hay gente que coloca una especie de plástico en el balcón para evitar que la brisa entre de lleno a la casa.
• Si la humedad relativa dentro de la casa baja por debajo de 40%, es necesario el uso de un humificador. De no hacerse, costará respirar, tragar y aumentará la estática del ambiente. Los valores óptimos van desde 40% a 60%.
• La revisión del clima debe hacerse diariamente. Las condiciones atmosféricas tienden a cambiar muy rápido, por lo que es vital estar preparado.
• Que la temperatura sea menor a 0 °C no significa que vaya a nevar.
• A la hora de escoger apartamento, evitar las esquinas, sótanos y las últimas plantas. Si se tienen vecinos por todos los puntos cardinales, cuando ellos enciendan su calefacción, calentarán tu apartamento.
• Los autobuses se adhieren a un horario muy estricto. Esto disminuye el tiempo a la intemperie.
• La única opinión que cuenta para medir el invierno, es la propia. No hay que hacer caso a gente que habla del invierno como una tempestad. Es más llevadero de lo que se piensa.
• En la francisation dan miles de consejos para sobrellevar con éxito el invierno.
• Abrir la ventana por 5 minutos, mientras la temperatura se encuentre por debajo del punto de congelamiento, matará las bacterias que haya en la casa, ya que las mismas no sobreviven a temperaturas tan bajas.
• El calentamiento global es una realidad. Este ha sido uno de los inviernos más clementes de los que se tenga memoria.

Ahora, para dar un sentido más informal al asunto, vamos con lo que nos gusta, lo no tanto y lo curioso del invierno canadiense.

Nos gusta:

• El frío: Por venir de una ciudad muy calurosa (media 30 °C todo el año), el frío es algo nuevo para nosotros.
• La ropa: La gente se viste muy bonito en esta época. Los abrigos de invierno son muy elegantes y mi esposa no podía dejar de quitarle los ojos a la gran variedad de botas que por aquí usan.
• Paisaje: Asomarse por la ventana, y ver todo cubierto de nieve, es algo mágico. Igual de relajante, es ver nevar.
• Actividades al aire libre: Tuvimos la oportunidad de hacer actividades de invierno, y son divertidísimas.

No nos gusta tanto:

• Hábitos de aseo: Perdón por insistir en este punto, pero con la excusa del frío, mucha gente no se ducha en días. Igualmente, usan la misma ropa una semana entera. Pero, para ser sinceros, esta práctica no se la hemos visto ni a latinos ni a canadienses (blanco y en botella, leche).
• Slush weather: Cuando la nieve se derrite y se mezcla con el barro, crea una superficie resbaladiza y desagradable a la vista.
• Verglas: Caminar sobre esa capa de hielo muy fina y transparente, que cubre el suelo en algunos días de invierno, es una invitación a caerse.
• Quitarse la ropa: Cada vez que entras a una casa, debes quitarte las botas y los abrigos. Tener que vestirte y desvestirte a cada rato, es un poco tedioso.
• Brisa: Cuando la brisa sopla con fuerza, la sensación térmica se dispara, volviendo el día en una tortura.
• Tormentas de nieve: Cuando cae una tormenta, todo se vuelve más difícil. Y lo peor, que aquí nada se detiene por culpa de la nieve.
• Duración del día: Aquí en el invierno oscurece a las 4:30 pm, dejándote sin mucha luz solar. Es importante tomar vitamina D para suplir esta carencia.

Lo curioso

• Trineos para bebés: Dado que es muy difícil rodar un coche para bebés en la nieve, muchos padres arrastran a sus hijos en pequeños trineos provistos con una soga destinados para tal fin.
• Quitarse las botas: Casi todos los sitios disponen de lugares para colgar los abrigos y dejar las botas. Todo el mundo anda en medias o calcetines.
• Rebajas en abrigos: La mejor época para comprar abrigos es a principios de marzo. Se consiguen descuentos de hasta 50%.
• Enfermedades: Aquí nos han dicho que la gripe no es culpa del frío, sino de la cantidad de gémenes que se mantienen en ambientes cerrados. Debe ser cierto, porque no nos enfermamos.

Espero que les haya gustado esta nota.

À la prochaine!

AUTOR:Aleymina - De Valencia a Montreal©

Somos una pareja venezolana en el proceso de inmigración a Montreal, Quebec. Canadá.
Este blog es una bitácora detallada de todo nuestro proyecto de migración.